Un punto y aparte

Esto es: , , , ,

Érase una vez un grupo de ingresantes universitarios que escribieron su primer "nota" periodística asustados e inseguros en el aula 35 de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Unco.

Érase una vez esos mismos estudiantes, superando su primera Introducción al Periodismo, y recorriendo el Camino del Inca junto a Emile Zolá, Oppenheimer, Moreno, Botana y Hearst. Estudiantes que los viernes dejaban el aula de Redacción I para salir a encontrar una noticia a las 2 de la tarde, cuando en la ciudad no deambulaba una sola alma.

Érase una vez -y no hace tanto- esos estudiantes jugando a ser periodistas en las redacciones de Sociedad Anónima y A-contramano. Y el juego que se volvía cada vez más serio: era Redacción II.

Érase hasta ayer que esos estudiantes escribieron sus primeras investigaciones, conocieron las burocracias, el miedo a la denuncia, y la militancia del dato. Fue también hasta ayer que esos estudiantes dejaron atrás (o intentaron dejar) su mentalidad de papel para producir para la web 2.0. Y de entre esas producciones, nació esta bitácora.

A partir de hoy Sillas en la vereda abandona pretensiones académicas y queda solo. Por cuenta propia.

No volveremos a esconder la mirada tras el monitor cuando Ale pregunte sobre las actualizaciones de los blogs. No volveremos a rechazar un mate amargo de Fabián, ni a reír (o no) con sus chistes. No estará Lieza para ayudarnos cuando tengamos problemas con la tecnología. No volveremos a entregarles notas y trabajos. Las correcciones ahora las harán otros. Seguro que con menos paciencia; seguro que con menos humor. Se acabaron los días de risas compartidas y rateos de a tres al son de "¿nos tomamos unos mates hasta las 16.30?".

Cuatro años pasaron de aprendizaje. Cuatro años de conocer al periodismo, y "aprender periodismo haciendo periodismo". Es momento ahora de poner un punto y aparte. Quedarán los docentes: quizás con más estudiantes, quizás con blogs más actualizados. Y quedaremos nosotros y nosotras, con otras materias y diferentes rumbos en el camino al título que diga "Licenciado/a". Claro que, aunque simbólico, hoy podemos decir que el otro título ya lo tenemos: ya nos recibimos de periodistas.



Más sobre nosotros/as: